Extraño los juegos de la Liga pequeña Javier de beisbol (Playball CES)

Hoy que es viernes puedo recordar vivamente la alegría que como familia compartíamos cada fin de semana cuando se acercaba el día de juego. Extraño tanto esa pregunta llena de anticipación: ¿papa, podes ver cuántos confirmaron ya en el chat para mañana? ¿ya somos 9?

Hoy es difícil no poder ver los ojos de mi hijo brillar con ilusión al decirle que ya cuenta con al menos otros 8 compañeros de Playball para poderse “completar”. Seguro, algunas veces se suman un poco menos de 9 niños pero lo importante siempre es tener el mínimo para poder jugar.

¿Y mañana sábado? Mañana no empezaremos el día muy temprano revisando que tengamos listas todas las cosas que queremos llevar: batera, guante, guanteletas, bates, gorra, hielo, ¿camisa verde o camisa blanca?, las cosas de catcher, botiquín, la cámara, etc.

Tampoco nos estaremos preguntando, ¿quién se acuerda si es en Campo de Marte o en Vista Hermosa? Y tampoco saldremos corriendo sí creíamos que era en Vista Hermosa y resulta ser que el juego es en Campo de Marte — allá el parqueo está un poco más lejos del campo y nos lleva un poco más de tiempo llegar.

Mañana no nos darán los buenos días ni las bases ni el montículo. Mañana el “dugout” permanecerá vacío y mañana no escucharemos a los niños reír en el campo que los está viendo crecer.

Mañana extrañaremos ver a nuestros niños haciendo lo que más les gusta hacer, jugar beisbol.

Cuando solo respiro…

Cuando solo respiro nada me hace falta. En esos breves momentos todo es perfecto – al menos así parece ser para mí. Cuando solo respiro entro en un mundo tan singular que tan solo puede existir dentro de mí.

Las preocupaciones, ansiedades e incluso las alegrías y anhelos dejan de ser cuando solo respiro. Me parece algo extraño pero la mejor sensación de todas es poder ver de lejos mis pensamientos y emociones ir y venir sin que puedan apoderarse de mi ser.

Cuando solo respiro soy yo mismo, sin ser prisionero de mis prejuicios y expectativas. Respiro solo para mí, sin tratar de estar bien con nada ni nadie a mi alrededor.

Que liberador es perderse en el ritmo de mi propia respiración! Que liberador es flotar en ese ritmo único que solo mi cuerpo puede crear. Es magnifico poder ver en los instantes que solo respiro, que las cosas son perfectas tal y como son, cuando solo respiro…

Que podría ser mejor que un buen café?

Hay muy pocas cosas que disfruto en la vida tanto como un buen café. Un espresso intenso, de tueste obscuro y un poco de acidez. Preferiblemente café de Antigua.

El latte es una de mis bebidas favoritas y no me creerían cuantos me solía tomar todos los días. Algunos en la casa y muchos otros en reuniones o cafeterías. Debo confesar que en ese momento de mi vida llegué a tener un problema con el café.

Era adicto. Me despertaba a las 5:00am no para empezar mi día con entusiasmo. Me despertaba alas 5:00am con un dolor de cabeza fuerte por qué NECESITABA tomar café. Era dependiente de la cafeína.

Esos días ya quedaron atrás y no le desearía ni a mi peor enemigo tener que pasar por el proceso de desintoxicación de la cafeína. Realmente fueron cuatro días nefastos que aunque quisiera, nunca podré olvidar.

Como se podrán imaginar tengo todo lo necesario para preparar café de todo tipo en mi casa. Así que es natural que más de alguno de ustedes se esté preguntando en este punto de la historia, ¿qué ha pasado ahora que este “cafeinomano” en rehabilitación ha estado en cuarentena durante más de 28 días con su cafetera prácticamente al lado de su cama en la casa?

Pues orgullosamente les puedo contar que estoy tomando la mitad de café comparado a lo que venía tomando después de la desintoxicación. Estoy tomando 2 lattes al día, cada uno con un solo shot de 1oz. Antes usaba 2 shots (doble shot) por cada latte.

Es increíble creerlo pero hay algo maravilloso que he descubierto en todo este proceso de aprender a medirme con al café. Descubrí que hay una solo cosa en el mundo que puede ser mejor que un buen café: Un buen café que te tomas por que lo quieres disfrutar y no por que necesitas otro poco de cafeína.

El permiso necesario para cambiar

Cuando una persona quiere trabajar con alguien más para modificar algún comportamiento, lo primero que debe hacer es obtener permiso para hacerlo.

Obtener este permiso es muy importante por qué las personas confundimos lo que hacemos con lo que somos. Si estamos tratando de cambiar el comportamiento de alguien sin obtener su consentimiento probablemente obtendremos una reacción defensiva.

Es natural. Que alguien más nos pida que cambiemos la manera en que hacemos algo muy fácilmente puede ser interpretado como un ataque personal. Al fin y al cabo, si creo que soy lo que hago y me piden que cambie lo que estoy haciendo, de alguna manera me están pidiendo que cambie quien soy. Buena suerte!

Pedir permiso es simbólico. Lo que realmente queremos con pedir permiso es lograr que la otra persona este abierta al cambio. Que esté en el mismo plano que nosotros y sienta que estamos de su lado. El permiso es un convenio entre ambos que dice: “vamos a trabajar juntos para ayudarte a mejorar.”

Este consentimiento es extremadamente poderoso y da muy buenos resultados. Especialmente cuando la persona con que estamos trabajando somos nosotros mismos.

Ve adelante y date hoy mismo ese permiso que tanto estás buscando para cambiar.

Como medir la productividad en oficinas remotas

Y para continuar con la serie en trabajo remoto hoy les quiero compartir mi sentir sobre como medir la productividad cuando hay personas trabajando desde lejos (ojo, trabajo remoto no forzosamente significa trabajar desde casa.).

Primero, revisemos algunos factores que distorsionan la evaluación de productividad de las personas en un ambiente tradicional de oficina presencial.

Podemos empezar con el hecho de que una persona llegue antes que las demás y se quede más tarde puede dar una falsa percepción de que tiene un mayor compromiso con la empresa y que está logrando mejores resultados. Todos sabemos que esto no necesariamente es cierto!

¿Que tal las personas que caen muy bien y tienen excelentes relaciones interpersonales con todos? Aunque al final del día, una persona que no está produciendo será descubierta eventualmente, la capacidad de ser agradable con los demás puede retrasar mucho este proceso.

¿Y qué hay de la persona que está ocupada todo el tiempo en algo que no está vinculado a lo que se espera que haga como trabajo principal? Hace mucho pero no genera nada de valor. Verla trabajando duro puede nublar nuestro buen juicio.

Y así tenemos muchos ejemplos más de como puede una persona pasar desapercibida sin ser productiva en un ambiente de trabajo tradicional. Esto no ocurre en un formato remoto o distribuido.

Una vez que el superviso NO puede ver a qué hora empieza o termina de trabajar una persona. En el momento que esta persona mayormente interactúa con sus colegas para tener discusiones profesionales y no tiene más opción que enfocarse en ejecutar el trabajo que se le ha asignado, la única evidencia que puede presentar de su rendimiento y productividad es la calidad de su trabajo.

Así es, el trabajo remoto eleva la calidad y puntualidad del trabajo realizado a ser la única manera viable de evaluar a una persona. No hay más remedio. Todo lo demás desaparece. Si se imaginan gerenciando a alguien a quien no pueden ver trabajar, ¿qué otra opción tendrían para evaluarlo?

Para que ver hacía atrás y para que ver hacia adelante

Durante esta época en la que todos tenemos más tiempo, es natural que estemos pensando más. Es esperado que nuestra mente esté constantemente viendo hacía atrás o hacia adelante. Es muy difícil estar en el ahora.

Que decide hacer una persona con sus pensamientos que van al pasado define de gran manera la calidad del futuro que puede construir para si misma. Veamos algunas opciones que encontramos en el pasado:

  • Lamentarnos de algo que ocurrió (que por el hecho de estar en el pasado ya no se puede cambiar) ⬇
  • Cargar con la culpa o estar culpando a alguien más por lo que sucedió. ⬇
  • Desear que lo que ocurrió nunca hubiera pasado. ⬇
  • Querer que las cosas que sucedieron no hubieran creado la situación actual. ⬇
  • Entendimiento y aprendizaje. Estas son las dos únicas razones productivas para pasar tiempo en el pasado: Aprender de lo que ocurrió y entender los detalles de la situación para poder corregirla lo más que podamos y evitar que algo parecido vuelva a suceder. ⬆

Ahora el otro lado de la moneda, los pensamientos que se van hacía el adelante. Que decide un persona hacer con estos pensamientos determina el grado de preparación y capacidad de reacción que tendrá ante los eventos que están por venir. Algunas de la opciones acá son:

  • Imaginar el peor escenario posible, generar miedo. ⬇
  • Sentirse abrumado(a) por la incertidumbre de todo lo que puede pasar. ⬇
  • Enfocarse en elementos que están fuera de su control. ⬇
  • Datre por vencido(a) prematuramente al imaginar resultados negativos posibles. ⬇
  • Buscar y encontrar oportunidades escondidas para poder tomar ventaja de ellas antes que los demás y así lograr los objetivos deseados. ⬆

Creo que en ambos casos está claro, muy claro, para qué ver hacía atrás (buscar entendimiento y aprendizaje) y para que ver hacia adelante (encontrar oportunidades). Todo lo demás es pura perdida de tiempo.

El arte y las emociones

Confieso que todavía no soy una persona que experimente sus emociones profundamente. Pero tampoco esto tan lejos cómo antes. Vamos poco a poco.

Hoy por la tarde vi el final de la película Mi Amigo el Dragón. Me sentí bastante conmovido, inspirado y motivado. Si fue una experiencia fuerte de emociones. Me gustó.

El arte, ya sea cine, música, pintura, poesía, etc. tienen ese mágico poder de despertar ese mundo secreto que podemos experimentar los humanos a través de sentir nuestras emociones.

Y la relación entre el arte y las emociones es recíproco. Cuando experimentamos emociones profundas naturalmente buscamos una manera creativa de expresarlas y esto usualmente culmina en un proceso creativo artístico.

Es cierto, no todas las emociones que experimentamos son positivas. Tampoco todo el arte que existe inspira. Esto realmente no importa. Lo que importa es que estemos abiertos a sentir plenamente nuestras emociones en el momento que lleguen y que tengamos las vulnerabilidad necesaria para expresar eso que sentimos.

Solo asó podemos regalarle al mundo un poco de ese arte que todos llevamos dentro.

Un proyecto para cuarentena

Y hoy un post extremadamente técnico 🙂

La semana pasada actualicé mi WordPress mulliste a la versión 5.4. Todo ha funcionado muy bien, excepto una advertencia que me sugiere que actualicé mi versión de PHP.

Resulta ser que como estoy corriendo una instancia de AWS Lightsail y Bitnami para WordPress mulliste esto no es tan simple como uno quisiera. Todo tiene un precio.

En este momento estoy tomándome unos 20 minutos de break luego de estar batallando por más de una hora para actualizar el stack LAMP que utiliza este servidor en donde corro el blog y mi podcast, Conceptos.

Lo que estoy pretendiendo hacer es lo siguiente:

  • Clonar mi servidor de producción en AWS Lightsail a una nueva instancia. ✓
  • En esta nueva instancia:
    • Hacer un Backup de la base de datos. ✓
    • Instalar el Stack LAMP de Bitnami que trae el PHP actualizado en la nueva instancia . ✓
    • Restaurar el backup de la base de datos. ✓
  • Validar que todo funcione ok. ❌
  • Mover el IP de la instancia de producción a la nueva instancia funcionando.

Por alguna razón en este momento no estoy logrando que el Apache Webserver funcione bien después de la actualización. Por el momento voy a publicar este post, voy a hacer un snapshot de este servidor de producción (para no perder este artículo) y voy a intentarlo una vez más. Si quiere bueno y si no mañana será otro día para pelear.

Mañana actualizaré este artículo para contarles si ya estamos trabajando con un stack actualizado o si fui derrotado.

Como actualizar el stack de un Lightsail AWS WordPress Multisite

Bueno, al final la idea de actualizar solo el stack en el servidor existente no funcionó. Lo que paré haciendo fu crear una instancia nueva de un servidor Bitnami AWS Multi-Site nuevo ya con el Stack actualizado que quería.

Luego procedí a migrar mi WordPress Mulliste que resultó, después de mucho aprender, más simple de lo que creía. Acá mi procedimiento:

  • Hacer Backup de la tabla bitnami_wordpress en la base de datos original
  • Hacer un .tar del directorio /opt/bitnami/apps/wordpress completo
  • Crear la instancia nueva de Bitnami WordPress Multisite en Lightsail
  • Restarurar el Backup de la DB
  • Crear una copia del directorio /opt/bitnami/apps/wordpress original del nuevo servidor
  • Descomprimir el .tar a /opt/bitnami/apps/wordpress
  • Modificar el archivo wp-config.php original para que use el password de usuario de Bitnami nuevo
  • Pegar el ip de la máquina original a esta nueva instancia
  • Generar los certificados ssl de todos los sitios de nuevo por medio de LetsEncrypt
    • Esta parte me causó un pco de problemas y modificó el sitio principal de el WordPress multisite you’ve que cambiario de regreso a mano

Así que si están leyendo esto en línea ya estamos sobre el nuevo stack y todo está funcionando ok.

Cualquier duda si están tratando algo similar escríbanme a @manoloalvarez en Twitter.

El reto más grande del trabajo remoto, la comunicación asíncrona

Desde que nacemos aprendemos a comunicarnos en tiempo real. Estamos frente a frente con nuestros papás y familia. Es la manera en que cientos de miles de años de evolución nos han programado para comunicarnos.

La tecnología y el internet cambiaron la manera en que nos comunicamos prácticamente de la noche a la mañana. Hoy tenemos Skype, Zoom, FaceTime, Google Meet, etc. y suficiente ancho de banda para tener videoconferencias con quien queramos cuando queramos. Este no es el problema.

Estas tecnologías nos ayudan a poder tener comunicación en tiempo real con otras personas de una mejor manera. Es decir, las videoconferencias aunque son una muy pequeña parte del trabajo remoto, no resuelven el problema más grande.

La videoconferencia nos permite comunicarnos desde lugares distintos solventando el problema de la ubicación. Pero el verdadero reto a resolver para lograr trabajo remoto efectivo y poder tomar ventaja de todos su beneficios es el manejo del tiempo.

Una operación remota efectiva implica que cada persona va a manejar sus horarios de maneras distintas. Es parte de la responsabilidad y maravilla de este modalidad de trabajo.

Algunos van a almorzar a las 12 y otros a la 1. También algunos de los que hacen ejercicio en la mañana van a empezar un poco más tarde que los que quieren ir a traer a sus hijos en la tarde y querrán salir temprano. Y así sucesivamente.

Trabajo remoto también significa poder manejar personal en otras zonas horarias que lo más seguro no estará disponible en los mismo horarios que las personas que estén en el horario de la central.

Entonces, lo que debemos aprender a manejar realmente bien es la comunicación asíncrona. Es decir la comunicación y la colaboración que no ocurren “en vivo” o al mismo tiempo. Para lograr esto es vital mejorar nuestra comunicación por escrito y aprender a utilizar herramientas como Mattermost, Slack, Jira, Pipedrive (disclaimer: 3 de las 4 las usamos en mi empresa Ubiquo).

Así que para empezar a pensar en irse remoto les recomiendo ir desarrollando las siguientes habilidades:

  • Comunicación por escrito (creo que esto es lo más importante por mucho)
  • Saber esperar
  • Planificación
  • Empujar la información versus jalar la información (más sobre esto en un futuro artículo de la serie)

La oficina opcional versus la oficina necesaria

Nota aclaratoria: El contenido de este post está destinado a trabajos intelectuales que NO requieren la producción de objetos físicos.


Cuando le preguntamos a 10 personas, ¿a dónde vas cuando quieres trabajar en tus proyectos más importantes?, 9 de esas 10 personas van a responder que van a cualquier otro lugar que no sea la oficina. Yo definitivamente estoy entre esos 9.

Las razones principales que citan las personas para responder así son:

  • Tengo muchas interrupciones en la oficina:
    • Mis compañeros de trabajo y jefes me interrumpen en todo momento
    • El ambiente no me permite concentrarme durante períodos largos de tiempo
  • Llego cansado y de mal humor por el tráfico 1.Ir a la oficina requiere traslado, tiempo y mucho desgaste. Imaginemos que a alguien le lleve 45 minutos ir a la oficina y otros 45 minutos regresar de la oficina. Eso se convierte 1.5 horas al día por 5 días a la semana y ya estamos en 7.5 horas cada semana. Ahora, tenemos 4 semanas al mes y llegamos 30 horas al mes. Tenemos 12 meses al año que finalmente nos dan 360 horas perdidas en el año por persona.
  • Me distraigo fácilmente con los problemas de los demás
    • Paro trabajando en cosas que no son mis prioridades

Pero si no buscamos ir a la oficina para hacer nuestro mejor trabajo, ¿para qué diablos hacemos la gran inversión de movernos a trabajar ahí? No tengo idea!

Si embargo seguimos sin cuestionar por qué es necesario presentarse a la oficina todos los días. Creo que es importante cuestionarnos por qué. Puede ser que las respuestas que encontremos, particularmente en este período de pandemia, nos liberen de creencias milenarias que nos dicen que para ser productivos tenemos que estar todos juntos en el mismo lugar al mismo tiempo.

En los siguientes días estaré escribiendo una serie de posts sobre por qué creo que las oficinas no deben ser vistas como una necesidad para que existan las empresas. Con esto no quiere decir que las oficinas NO debieran existir y que todos debemos cerrar nuestras oficinas de inmediato.

Tan solo voy a estar proponiendo que puede ser posible reconfigurar las oficinas para que sean lugares mucho más agradables especialmente diseñados para un pequeño porcentaje de actividades empresariales y personales. Voy a estar proponiendo que las oficinas deben verse una opción disponible para las personas que en un momento particular las quieran utilizar.

Si pensamos en que cómo empresa u organización NO requerimos una oficina para lograr nuestros objetivos, seguro la construiremos de una manera muy distinta que si pensamos que para poder existir NECESITAMOS una oficina.

Referencias

Referencias
1 Ir a la oficina requiere traslado, tiempo y mucho desgaste. Imaginemos que a alguien le lleve 45 minutos ir a la oficina y otros 45 minutos regresar de la oficina. Eso se convierte 1.5 horas al día por 5 días a la semana y ya estamos en 7.5 horas cada semana. Ahora, tenemos 4 semanas al mes y llegamos 30 horas al mes. Tenemos 12 meses al año que finalmente nos dan 360 horas perdidas en el año por persona.