Que te está deteniendo: la falta de habilidad o el miedo?

Veo a mi alrededor y cada vez veo mas cursos especializados enfocados en cómo aprender a hacer esto y como mejorar las habilidades que se tienen para hacer aquello. Todos centrados en mejorar la capacidad técnica de las personas.

Mi experiencia ha sido que, aunque las habilidades técnicas (skills) son muy importantes, incluso necesarias, rara vez son lo que están deteniendo el desarrollo / avance de una persona. Esto aplica para cualquier área de su vida. Lo que yo mismo he experimentado, y lo he visto ya en cientos de personas, es que las limitaciones casi siempre son emocionales y muy relacionadas al miedo.

Ejemplifico con una historia de una persona que conozco.

Ella es una persona que la gusta mucho nadar. De hecho, tiene mas de 4 años de entrenar formalmente varias veces por semana en una piscina que está por acá cerca. Un entreno promedio puede estar entre 1,600 – 2,000 metros. Es bastante.

Esta persona decidió inscribirse en un mini-triatlón como parte de un equipo y hacer el tramo de la natación. Tan solo 400 metros. Pan comido, ¿no? Pues la realidad es que no. Aunque ella tenía toda la habilidad técnica para nadar esta corta distancia se retiró a los 25 metros. ¿Por qué? La competencia era en un lago, agua abierta. No había corriente ni olas. Simplemente era agua abierta y el agua estaba tan transparente que se podía ver el fondo. Sintió miedo e incapacidad de seguir adelante.

¿Que tal si no necesitamos como aprender a hacer MAS cosas? ¿Que tal si todo lo que necesitamos para potenciarnos es entender nuestras emociones y miedos para hacer lo que ya sabemos que debemos hacer?

Si quieres saber mas de como lograrlo, deja un comentario con tu correo.

Como realmente motivarte. Construye visión

Hay tantos libros de autoayuda. La palabra motivación aparece hasta en la sopa. Creo que de alguna manera hemos perdido el norte y el verdadero valor de lo que estar motivado significa. Creo que lo estamos confundiendo con amanecer de buenas o la sensación efímera que tenemos cuando las cosas salen como queremos.

Creo que la motivación nace de tener una visión clara y contundente de como queremos que sean las cosas. Al igual que las ideas vienen de las personas, la motivación viene de la visión. Y justo este es el punto. Estamos, creo yo, viviendo en un mundo donde el valor mas alto es querer sentirnos bien. Es decir, estar motivados. Buscamos la motivación com un fin. Tan solo queremos estar motivados para sentirnos bien.

Esto no es así. La motivación no es un fin. Tan solo es el medio. Y es un medio que cuando es aplicado como se debe no siempre se siente bien. La motivación es una poderosa herramienta que utilizamos los seres humanos para materializar nuestros sueños (visión). Es muy difícil sentirnos motivados solo por qué si. Antes, de entrar en este estado es imprescindible que nazca la ilusión de ese mundo mejor. De como pueden ser nuestras vidas  si tan solo logramos nuestro objetivo. Sin visión no existe la motivación.

Este tren de pensamientos es lo que me ha llevado a estar meditando ya por mas de un año. He encontrado que tomarme 20 minutos al día en estar presente conmigo y conectarme con lo que realmente quiero aumenta mi motivación. Y si, esto no siempre se siente bien pero al final del día, ese no es el objetivo. El objetivo es construir poco a poco, y con mucha perseverancia,  la vida con que siempre he soñado.

Encuentra tu texto sagrado y léelo todos los días

Este texto sagrado puede tener muchas formas. Una gran cantidad de personas encuentran su texto sagrado en las escrituras religiosas. Otras buscan inspiración en mantras. Muchas de las personas que conozco usan citas de personajes que han trascendido durante la historia.

La realidad es que no importa de donde venga el texto sagrado. Lo importante es que el contenido del texto te inspire. Te ayude a conectar con lo que quieres lograr en tu vida. Que te recuerde lo que te inspira. Que te motive a ser la mejor versión de ti mismo.

Una vez encuentres este texto que te ayude a generar un estado de motivación es importante visitarlo todos los días. Hay algo en la repetición y los rituales que nos ayuda como seres humanos a profundizar en las experiencias que vivimos.

Personalmente yo estoy empezando a trabajar con un texto escrito por un científico /filosofo  a quien admiro mucho. En el texto encuentro mucha sabiduría, fortaleza interna y la inspiración para empujarme a dar lo mejor de mi cada día.

Como resolver las crisis o problemas sin usar el miedo

Por momentos me impresiona lo mucho que los seres humanos utilizamos el miedo para lograr las cosas que queremos. En especial, lo hacemos mucho cuando nos vemos ante un problema o lo que muchas personas describirían como una “crisis”.

Estando al tanto de lo mucho que yo mismo utilizo el miedo como motivador y, al mismo tiempo reconociendo lo desgastante y poco sostenible que es esta estrategia, estoy haciendo un empuje bastante fuerte en Interactúa para cambiar este patrón de conducta.

Lo primero que se debe hacer cuando se quiere cambiar un comportamiento es entender de donde viene. Creo que el caso de utilizar el miedo como motivador es bastante simple. No hace falta mas que ver como estamos criando a los niños y dar un vistazo a como funciona el sistema educativo. Prácticamente la motivación con que muchos de nosotros crecimos y muchos niños actualmente están creciendo es: “evitar el dolor”.

i.e. Voy a sacar buenas notas para que mis papás no me regañen / castiguen, voy a colaborar en clase para que la profesora no se enoje conmigo, voy a ordenar mi cuarto para que mi mamá no se oponga a que salga el fin de semana, etc.

Siempre hay dos maneras de ver las cosas. De una manera positiva o una manera negativa. Muchos de nosotros hemos crecido viendo las cosas de una manera en la cual lo primero que nos preguntamos es  ¿que pasa si no hago o logro esto? Si la respuesta es algo que no nos gusta, pues entonces nos movemos.

Ahora bien, que pasaría si todo viéramos el mundo de una manera distinta. Que tal si lo primero que nos preguntáramos al tener una decisión enfrente fuera, ¿como sería mi vida si logro esto? ¿en que tipo de persona me convertiré si sobrepaso este obstáculo? ¿que clase de ser humano quiero ser? ¿cómo se impactará al mundo si hago lo correcto en lugar de lo cómodo, no por qué tengo miedo sino por que esto es algo importante para mi?

Día tras día veo que los problemas se resuelven y las cosas medio marchan hacia adelante. Pero todo esto se da a cambio de un precio muy alto: la tranquilidad de las personas que viven en constante miedo de que pueden perder si algo sale “mal”.

Me pregunto hoy, ¿que hará falta en mi y en todos nosotros para que podamos cambiar todas aquellas cosas que no están bien por qué queremos un mundo mejor y no por qué nos cagamos del miedo? ¿Quizás empezar por entender que es lo importante para nosotros sea un buen punto de partida?

Quieres ser una papa o un huevo? Tu decides

Me parece fascinante el hecho de que cada persona tiene una reacción única y personal a cada evento que ocurre en su vida. Si, toda nuestra vida escuchamos que cada persona es única, pero al momento de reaccionar ante algo tenemos la falsa percepción de que todos reaccionan igual.

Por ejemplo, a mi me gusta que todo este planeado y saber que va a ocurrir después. Si veo que otra persona está contenta por que un imprevisto le rompió la rutina puedo tender a marcarla de irracional, etc.

¿Por qué papa o huevo? Porque la misma agua que deshace a la papa hace que el huevo se fortalezca. La realidad de nuestro mundo es que ocurren eventos que nos afectan a todos (el agua) pero el éxito y el crecimiento dependen de las decisiones que cada uno de nosotros tome respecto a lo que sucede (el huevo se fortalece y la papa se desmorona).

Que vas a ser en tu vida, ¿papa o huevo? Deja un comentario!

Un buen plan hoy es mejor que un excelente plan algún día

No hay nada peor que el análisis parálisis. Ese fenómeno que no se si ustedes han visto por ahí que consiste en no hacer nada en el nombre de estar buscando ya sean mas datos, mas información o un plan ideal.

Se caracteriza por el preparen, apunten, apunten, apunten, apunten, apunten….. Nunca llega el fuego.

No hay nada mejor para una empresa, y en especial para una “startup”, que la acción. El movimiento continuo es la única manera de llegar. Así que recuerda, un buen plan hoy que se pueda ejecutar ya siempre va a traer, sin duda alguna, mejores resultados que un excelente plan que puede ser, si es que todo sale bien, que vea la luz “algún día”.

Por qué hace mas sentido perseguir metas irreales

Los números usualmente son correctos. La probabilidad es una de las herramientas que más utilizamos todos los días. Y aún así, ignoramos esto cuando definimos las metas y las expectativas de todo lo que queremos lograr con nuestras vidas.

Lo más común es que una persona vea a su alrededor y defina sus metas en base a lo que su entorno califica como posible. Osea, todos están compitiendo por alcanzar las misma metas “reales”. Es un ocean rojo y muy peleado. Si tu tienes miedo de hacer algo, ¿adivina que? También todos los demás! Esto crea un océano azul. Un mercado donde todavía no hay nadie!

¿Que pasa cuando una persona ve hacia adentro y decide tomar ventaja de todas sus cualidades como ser humano? Crea metas y sueños irreales. ¿Que es lo bueno? Que muy pocas personas, probablemente menos del 5%, están buscando alcanzar estas metas. Hay mucho menos competencia!

Realmente creo que lo más difícil que tenemos enfrente para tener las vidas que soñamos yace aquí. En sobrepasar el miedo de realmente creer que podemos hacer más. En averiguar si la vida es mucho mas que lo que hacemos todos los días en el trabajo. En probarnos y fallar hasta encontrar nuestros límites. Y todo empieza con soñar y perseguir metas irreales.

–Philadelphia

Deja de pensar como elefante. Un tip para hacer mucho mas de lo que crees que es posible

¿No se si alguna vez has ido a un circo y has visto a los elefantes? Es super interesante ver como hacen los dueños del circo para mantener en control a estos grandes animales. Mira el dibujo a la derecha.

Desde muy pequeño el elefante es atado a una estaca de la cual simplemente no puede librarse. ¿Por qué no se puede librar? Porque el elefante bebé es débil, no controla su cuerpo y tampoco entiende que está pasando.

El elefante trata y trata de liberarse sin lograrlo. Al cabo de un par de días, al sentir la pita en su pata simplemente deja de intentarlo. Da por sentado que al estar amarrado no puede hacer nada. Y es cierto, en este momento que es pequeño no puede hacer nada.

Lo interesante es que el elefante crece hasta 20x en fuerza y tamaño corporal. De nuevo, vuelve a ver el dibujo. Lo único que haría falta para que el elefante se libere es un pequeño jalón de su pata (usando no mas del 5% de su fuerza para liberarse).

¿Por qué no lo hace? Simplemente porque no cree que sea posible hacerlo. Aprendió de pequeño que al sentir algo en su pata ya no hay nada que se pueda hacer y ya ni siquiera  lo intenta de adulto. Ha construido una imagen mental que no es no real y que dicta como se comporta. En ningún momento está volviendo a evaluar la situación en la que se encuentra y está asumiendo que sigue siendo pequeño y débil.

Llama la atención, que muchas veces esto nos sucede como humanos. Por lo menos a mi me pasa. Dejo que mis experiencias pasadas saquen la mejor partida mi y me ganen. Mis miedo, mis experiencias y todo el bagaje que traigo de el pasado nubla mi razón y no me deja evaluar realmente que posibilidades tengo.

La conclusión es que las cosas cambian. Tu cambias, tus habilidades cambian y lo que es posible cambia. No te quedes como elefante con la idea de que algo no es posible simplemente por qué alguna vez no lo fue. Evalúa lo que puedes hacer siempre y sobre todo, nunca te des por vencido antes de intentar algo. Seguro que pensando así lograras llegar mucho mas lejos y lograr mas en tu vida.

La conexión mente – cuerpo y por qué no aplicamos todo lo que aprendemos

Durante años me ha dado vueltas en la cabeza la pregunta, si leo tanto y se tanto, ¿pr qué no tengo los resultados que quiero? Entiendo el material, lo puedo racionalizar y sin embargo, no lo aplico, lo aplico mal o simplemente evado hacer lo que tengo que hacer.

Este es un tema complicado en el cual seguro se puede profundizar mucho. Pero también se pueden lograr rescatar 3 ideas principales de por qué nos sucede esto.

  1. La mente no opera en el vació. Está conectada al  cuerpo. Puede ser que la mente logre comprender un texto, idea o concepto. También puede ser que aplicar lo aprendido requiera de vencer algún temor o reacción emocional que se manifiesta en el cuerpo. Si la emoción no le permite a la mente actuar, de nada sirve el conocimiento.
  2. No queremos pagar el precio que cuesta lograr algo. Tenemos el conocimiento y tenemos muy presente la ilusión de lograr el resultado y obtener lo que queremos. Luego llega la el momento de ejecutar y encontramos dificultades. El precio de dejar la comodidad para hacer lo que sabemos que tenemos que hacer es mayor que los deseos de cumplir el objetivo. De nada sirve el conocimiento.
  3. Miedo a fracasar. Esta idea es un subset de lo que mencioné en el punto 1. Desde pequeños se burlan de nosotros por equivocarnos, nos regañan si fallamos y hasta “perdemos un año” de colegio si los fallos son suficientes. Esto crea una reacción emocional muy fuerte en contra de intentar cosas nuevas. Podemos aprender mucho pero si tenemos miedo de aplicarlo en síntesis para descubrir cosas nuevas, de nada sirve el conocimiento.

Un proceso para afrontar los fracasos

Primero, no tomes el fracaso como algo personal. Recuerda, tu eres distinto a los resultados que obtienes.

Con esta advertencia “emocional” fuera del camino, ya podemos empezar a trabajar. Lo primero que debes hacer al encontrar un fracaso es decidir que quieres hacer con el. ¿Lo quieres esconder o lo quieres corregir? Esto determina el siguiente paso a seguir.

Si quieres esconder tus fracasos, empieza a usar tu energía para mentir y manipular. No aprenderás mucho de esa manera.  No llegarás lejos También tienes la opción de reconocer la falla y empezarla a corregir. Este camino, aunque muchas veces más difícil, siempre te dará mejores resultados.

Nunca culpes a la situación o a otra persona. Trata de entender que hiciste para que esto sucediera. Si logras entender que causó la falla, seguro también podrás encontrar como solucionarla. No trates de tan solo pasar la página y hacer un “chapuz”. Dirige toda tu energía a encontrar una solución de fondo que resuelva el problema de raíz.

Dedica tiempo a entender que pasó y como lograste solucionar el problema. Repite una y otra vez. Cada fracaso ahora será una oportunidad de aprendizaje y el miedo a probar nuevas cosas se convertirá en un deseo de cada día aprender mas a través de la experimentación.