Relevancia

La relevancia es vital porque el acceso a la información se ha democratizado a pasos agigantados. Hoy, la persona promedio maneja mucho más información que los más avanzados científico de hace 20 años atrás.
Siempre se puede volver a empezar

Siempre se puede volver a empezar. Espera un momento. Eso no es cierto. Ahora que lo pienso bien, nos guste o no, siempre estamos volviendo a empezar. No tenemos opción de NO volver a empezar.
El precio de poder escoger (manejo de prioridades)

Escoger una cosa implica no escoger otra. No hay manera de darle la vuelta a esta realidad. El acto de elegir, por definición, trae consigo una pérdida: todas aquellas opciones que no fueron seleccionadas.
Cuando la confianza nos traiciona (una noche sin electricidad)

La verdad que vivimos en un mundo en donde confiamos en muchas cosas. Son tantas las cosas en que confiamos que ya hasta perdimos la cuenta de cuántas son. Ya ni siquiera estamos conscientes de en que tanto es en lo que confiamos.
A todo vapor

Decidir hacer algo y luego no hacerlo de la mejor manera posible es un pecado. Este comportamiento no es más que un homenaje a la mediocridad. Si algo nos está limitando a nivel de empresas, gobierno, país y humanidad es la falta de compromiso con aquello a lo que ya le hemos dicho “sí”.
Lo más dificil es…

… Ver las cosas tal y como son. Muchas veces, ver el mundo tal y como es, es demasiado doloroso. Entonces es que decidimos maquillarlo para no sentir dolor.
Nada saldrá como lo esperas (3 consejos para estar preparado)

Un emprendedor solo puede contar con una cosa: Que nada saldrá como lo espera. Todo lo demás es un juego de ruleta en donde cualquier cosa puede pasar. Hay que estar preparados.
Acá tres consejos que aunque suenan simples, llevan el proceso de emprender al siguiente nivel.
El santuario silencioso de una buena hoja de papel

En los momentos cruciales de un proyecto creativo a veces el mar silencioso de una hoja en blanco es justo lo que necesitamos. De vez en cuando es bueno apagar la computadora y refugiarnos en el santuario silencioso de una buena hoja de papel.
Las razones porque jugamos (el camino a empresas más productivas)

Las personas jugamos juegos para ganar. Nos gusta jugar cuando conocemos las reglas del juego y sabemos cómo va el marcador. Cuando una de estas dos cosas hace falta, el juego pierde su razón de ser. Cuando no sabemos cómo va el marcador o no entendemos qué es lo que podemos hacer o no para ganar, perdemos el interés.
Nadie se quiere perder una muy buena ensalada de pollo (el secreto para empezar a recibir más)

La habilidad de pedirle a los demás lo que queremos es un tipo de músculo. Mientras más lo utilizamos, más fuerte se pone. Las cosas que podemos o no obtener están muy correlacionadas con nuestra capacidad de pedir.