Los Números Críticos de la Empresa

Seguimos con Gazelles! Vamos con los Números Críticos.

 
“Un número crítico representa una debilidad clave en el corazón del modelo económico o la operación de la empresa que al ser resuelto tendrá un impacto positivo y significante en el negocio.”
Verne Harnish

Idealmente se deben contar con 2 números críticos, uno que viene del Balance General y otro que viene del Estado de Resultados. Un número crítico puede ser algo como la taza de utilización del personal de entrega a domicilio, metas de obtención de fondos o un incremento en el número de cuentas grandes para reducir la vulnerabilidad corporativa.

Es muy importante enfocar los Números Críticos a una causa de raíz y cambiarlos anualmente. Esto permite enfocar la energía en distintas áreas de la organización.

La pregunta, ¿Cuales es ese único punto, medible que debemos lograr en los siguientes 3 – 12 meses? es la clave para encontrar el número crítico. Veamos un ejemplo para concluir por hoy:

Dell Computer

En el 2001 Dell eligió incrementar la taza de ventas de servidores contra ventas de PCs, sabiendo que esto le ayudaría a la organización enfocarse en moverse  del mercado de PCs, que estaba empezando a estancarse, hacia el mercado de alto crecimiento de servidores.

El secreto está en que la “taza de venta de servidores contra ventas de PCs es un número que se puede medir y viene directo de los registros financieros de la empresa. Más aún, el enfoque en este único número determinó todas las acciones de Dell durante todo un año, logrando una alineación empresarial que rindió bastantes frutos.

¿Cual es tu número crítico?

El costo de las transacciones en las empresas 2.0

La ley de Coase dice:

“Una firma tan solo debe hacer lo que puede hacer de una manera más eficiente que las otras, y debe realizar fuera todo aquello que otras firmas puedan hacer de una manera más eficiente, después de tomar en cuenta los costos transaccionales que implica trabajar con proveedores externos.”

Esta ley propuesta en 1937 es más actual hoy que nunca. Cada vez más escuchamos la palabra “outsourcing” y vemos que tantas empresas se fusionan o forman alianzas estratégicas. La idea de la empresa todo poderosa que puede hacer todo poco a poco está muriendo. ¿A que se debe este fenómeno?
Al ver detenidamente la ley de Coase nos damos cuenta que las empresas deben tan solo enfocarse en realizar aquellas actividades que pueden ejecutar de la manera más eficiente, todo lo demás debe irse al “outsource”. Dentro de la estimación de este eficiencia la ley incluye el costo transaccional de trabajar con proveedores externos. Es en este punto en el cual debemos centrar nuestra atención.

La Web 2.0 a eso ha venido, a reducir los costos de colaboración y producción compartida. El costo de la colaboración a estado en picada desde hace unos cuantos años al punto en el que el costo de trabajar con alguien al otro lado del mundo puede ser casi el mismo que colaborar con la persona que está en la oficina de al lado.

Y no solo el costo directo de la colaboración está en declive. Las técnicas, metodologías y, por ende, la eficiencia con que se puede colaborar con personas fuera de la firma está incrementando exponencialmente. Esto reduce el costo e incrementa los beneficios directos de trabajar con personas fuera de la firma. Todo de acuerdo a la ley de Coase que fue postulada desde 1937.

Como que si esto fuera poco se tiene que tomar también en cuenta el hecho de la existencia de las grandes comunidades especializadas que están brotando en el Internet y todas aquellas personas motivadas a colaborar y aportar en un nuevo esquema de trabajo.

Es necesario tomar en cuenta sitios como Innocentive e Elance en donde miles de personas ofrecen su conocimiento en un mercado regulado por los mismos miembros de la comunidad y en donde las firmas pueden solicitar la resolución de problemas o la ejecución de proyectos. Lugares en donde miles de proveedores ofrecen sus soluciones propuestas en cuestión de horas. ¿Que pasa? La firma puede elegir al mejor postor tomando en cuenta precio, calidad y reputación del proveedor dentro de la comunidad.

Estos son tan solo algunos de los argumentos que sustentan el por qué estamos viendo tanto outsourcing. El costo de trabajar todo aquello en lo que no se especializa una firma es tan bajo fuera de ella que es necesario sacar todas las transacciones posibles hasta que se encuentre el punto donde sea más barato hacerlas dentro.

Las firmas se necesitan especializar en su negocio nuclear. Ya el mundo de los negocios hoy permite ejecutar todas las actividades que sean periféricas fuera. Procter and Gamble realiza más de la mitad de su investigación fuera de la empresa. BMW ya solo se enfoca en la inegeniería de los carros y el mercadeo de la marca; la fabricación de las partes y el ensamblado de los carros lo hacen fuera. En el mercado local en donde vivo las pizzerias están empezando a subcontratar empresas de mensajería para la entrega a domicilio de las pizzas.

Es necesario que se empiecen a evaluar las transacciones y su costo dentro de las empresas. Se debe encontrar cual es el negocio nuclear. Lo más importante es aprender a manejar todas estas nuevas herramientas y tendencias de colaboración que están brotando y tomar ventajas de ellas para permitirle a una empresa enfocarse en su negocio nuclear y trabajar todo lo demás fuera, posiblemente a costos menores que si lo hiciera internamente.

Bienvenidos a Wikinomics!

¿Es la crisis o seré yo?

Bien, bien bien. Durante varios meses ya me he preguntado, ¿cómo puede ser posible que en estos momentos de crisis económica esté teniendo el mayor auge en mi carrera profesional? En resumen creo que se debe al hecho de que pronto seré padre y hace un par de meses atrás tomé la decisión de que sin importar que esté pasando “en el mundo” mi familia estará bien. He decidido trabajar más duro y mejor que nunca antes. De aquí han salido las fuerzas para la inversión en la infinita cantidad de horas usadas para renovar este maLvAREeZ OnLinE. Suficientes “pajas”.

Hace unos momentos leí un artículo titulado “No es la recesión, usted es el malo“. Está volando por todo Twitter. Es un post muy directo que habla de como la mayoría de personas están tomando la situación actual como una excusa para el fracaso y bajar la guardia. Están bajando la ventas, no se preocupen, es la recesión! Estamos perdiendo clientes, no importa, eso es normal en tiempo de crisis. etc. Pareciese ser que la economía entró en plena recesión justo a tiempo para servirles de excusa. Muchas personas y empresas tan solo se quejan y no hacen mayor cosa por salir adelante.

La autora reconoce que mucha personas están legítimamente siendo afectadas por la crisis y procede a dar varias sugerencias de como dejar de sentirse “víctima”, dejar de buscar excusas, dejar de quejarse y aprender a aprovechar el momento:

  1. Aprender algo nuevo
  2. Trabajar más duro que todos los demás
  3. Hacer el trabajo sucio
  4. Tomar riesgos
  5. Dejar de alegar

Acá puedes encontrar el artículo completo por Lisa Barone (en inglés — para los que no saben, tal vez es hora de desarrollar esta habilidad para tener mejores probabilidades en este mundo globalizado que actualmente está en crisis)