La crítica “on line”

Criticar algo en público es cada vez más fácil. Poco a poco la cultura “on line” ha creado en un espacio virtual apto para despedazar los proyectos, acciones y sueños de cualquiera.

Todas son malas ideas

No hay idea que aguante su primer colisión con la realidad. Eso de que hay ideas buenas e ideas malas es puro cuento de hadas. ¡No hay buenas ideas! Toda idea, en cuanto sale de la mente que la creó, está destinada a morir.

Esta vez sin quemarlo

Cuando se encuentra algo que funciona nos podemos sentir muy dichosos. No es algo que pase todos los días y en el momento que llega a suceder debemos entender bien por qué está funcionando.

El maestro que no falla

No hay mejor maestro que la cruda realidad. Sin importar cómo se le quiera llamar, consecuencias o experiencia, afrontar los efectos directos de nuestras acciones es lo único que nos cambia de verdad.

Nunca a la primera vez

Aprender no es más que un proceso iterativo de fallar y corregir así que por definición, la primera ves que se hace algo nuevo, lo más probable es que no se podrá hacer bien. Y esto no es nada malo. Después de todo, casi nada sale bien la primera vez.

No hay nada de que temer

Así es la experiencia de vivir. Pasa esto, pasa aquello. Surgen problemas y luego se resuelven. Se pierden cosas y también se pierden personas. Ganamos algunos juegos y perdemos otros. A veces reímos al igual que a veces lloramos.

El desacuerdo en la empresa

Es un desacuerdo desinteresado que quiere aprender y compartir. Es extremadamente generoso y requiere de mucha vulnerabilidad porque muchas veces las propuestas individuales iniciales terminan enterradas en el olvido para que nuevas ideas colectivas puedan vivir.

El camino del emprendedor

El camino del emprendedor es un juego nefasto que pone a prueba a cualquiera. También, la recompensa al final del camino es el más dulce néctar que un ser humano jamás ha probado.

Aprender a soltar el pasado

Y así es. Muchas veces el no poder dejar ir el pasado es mucho peor que lo que en realidad ocurrió. Aprender a dejar ir es una de las habilidades más importantes que se pueden aprender.