Un joven decide que va a estudiar medicina. Está por empezar su carrera. Su familia lo festeja, se hace bastante alboroto alrededor de la decisión. Una pareja se va a casar. Van a empezar una nueva familia. Vienen las despedidas de solteros, fiestas, etc. Alguien se inscribe en el gimnasio y ya siente que está en forma con tan solo haber firmado el cheque. Otra persona compra un libro y cree que ya tiene el conocimiento con haberlo agregado a su librera.
La realidad es que somos una sociedad enfocada en festejar el inicio de las cosas. No somos buenos en terminarlas. En esta sociedad actual las personas dejan la universidad (ojo! no siempre esto es una mala decisión), se divorcian, pagan membresía anual al gimnasio que nunca usan y acumulan libros que nunca leen.
Hay bastante mas valor en terminar lo que empezamos. Comprometernos con hacer lo que decidimos y llevar cada uno de nuestros proyectos a su conclusión. Por ejemplo, terminar nuestros estudios, comprometernos a mantener nuestras familias unidas y felices, estar en forma y hacer ejercicios después del 15 de enero y leer los libros que compramos.
Este hábito de terminar lo que empiezas puede hacer todo el cambio en tu vida. Es un compromiso contigo y con lo que quieres lograr en la vida. No festejes que empezaste algo, festeja el compromiso de haber seguido hasta el final y haber terminado lo que empezaste!