Estoy seguro que un 90% de las personas que leen este blog han estado en una reunión como la que se muestra en el vídeo. Está muy, muy divertido y representa con gran exactitud lo que ocurre en muchas reuniones en las cuales se está definiendo un proyecto: el cliente pide algo incoherente o irrelevante y la empresa proveedora defiende la solicitud a costa de todo con tal de mantener su status de “experticia” y demostrar que lo puede hacer.
Es cierto, decir “no” es difícil, es incómodo e incluso puede dar miedo. Sin embargo hay muchas razones válidas para hacerlo. Si en realidad una persona se considera experta debe poder también discernir que solución tiene mas probabilidades de tener éxito y no solo buscar complacer al cliente a cualquier precio. Incluso al punto de ofrecer algo que en la realidad es imposible.
Me da bastante risa como cada rol se comporta en el video y aunque pareciera que lo están haciendo con “maldad”, si lo traducimos al mundo real, cada persona tan solo está cumpliendo con su función de acuerdo a lo esperado en nuestra actual cultura corporativa. Ustedes, ¿que piensan?