Aprovechar el tiempo al máximo

Todos los días, sin importar qué tan cargados sean, tienen pequeños momentos que a veces desperdiciamos. La realidad es que no los desperdiciamos porque sea imposible aprovecharlos, los desperdiciamos por costumbre.

Recorrer viejos caminos

El inexorable paso del tiempo no se puede detener. Los años no pasan en vano. Cuando unas cuantas vueltas al sol han quedado atrás, algunos viejos caminos se dejan de recorrer.

Ah, pero aunque un camino quede atrás, si sus senderos son dulces, la memoria nunca lo olvidará. Puede ser que los cambios en circunstancias de vida y nuevas prioridades creen un desvío temporal pero el anhelo de regresar siempre arde en el corazón.

Incluso los días largos terminan

Hay ciclos de veinticuatro horas que son más difíciles de manejar que otros. Unos están más cargados, otros menos. Aunque no hay día que no dure veinticuatro horas, sin duda alguna, algunos se sienten mucho más largos que sus hermanos “pequeños”.

Lo que queremos y lo que quisimos no son la misma cosa

La memoria es corta cuando queremos recordar los eventos que se dieron años atrás, durante nuestra niñez. A la vez, la memoria pareciera ser infinita cuando tratamos de olvidar la programación subconsciente que al día de hoy rige nuestros comportamientos y expectativas.

Hay un lugar lejano que está muy cerca

Los segundos de vida que a cada persona le quedan se desvanecen con cada bocanada de aire que toman. Esta cuenta regresiva es inevitable y nadie sabe cuándo finalmente el reloj va a llegar a cero. El tiempo no pasa, se acaba.

Maximizar el tiempo durante las reuniones de equipo

La especialización en las empresas es algo muy importante. La combinación de habilidades especializadas es la razón por la cual las empresas y los equipos existen. Si hacemos una analogía con los deportes lo podemos entender mejor. Un portero se especializa en prevenir goles, un delantero se especializa en hacer goles. Un equipo de futbol conformado por solo delanteros nunca ganará un campeonato.

Un poco más de tiempo

Date un poco más de tiempo. Sí, sé que todos tenemos un tiempo finito en este planeta y que estamos viviendo contrarreloj pero esto no quiere decir que seas impaciente con los resultados. Como dice Naval Ravikant, “Sé paciente con los resultados pero impaciente con la acción.” Es decir, dale tiempo a que lleguen los resultados pero empieza a moverte YA.

¿Qué es lo importante para ti?

Empecemos por reconocer que lo que es importante para una persona puede no serlo para otra. Es decir, la importancia es totalmente subjetiva. Lo que es una prioridad para mí probablemente no lo sea para ti.

Con esa aclaración inicial hecha, podemos pasar a decir que cuando una persona decide que algo es importante para ella hará todo lo posible para trabajar en ello. Le dedicará todo el tiempo y recursos que tenga disponibles. En casos extremos esa prioridad so volverá el mundo completo de la persona. Lo importante siempre pasa a primer lugar.

Tomarse el tiempo, una gran ventaja competitiva

Las cosas buenas requieren de tiempo para llegar a ser. Las grandes amistades no nacen de un día para el otro. Los mejores vinos necesitan de muchos años para añejar. Los grandes atletas entrenan durante miles de horas antes de llegar a triunfar. Nada que valga la pena llega de la noche a la mañana.