Nadie se quiere perder una muy buena ensalada de pollo (el secreto para empezar a recibir más)

La habilidad de pedirle a los demás lo que queremos es un tipo de músculo. Mientras más lo utilizamos, más fuerte se pone. Las cosas que podemos o no obtener están muy correlacionadas con nuestra capacidad de pedir.
Todos somos complices

¡Oh! Qué fácil es culpar y jugar el rol de víctima. Tantas cosas que no queremos en nuestras vidas. Tantas situaciones que queremos que fuesen diferentes. Tantos cambios que quisiéramos hacer. Pero, “No podemos, no hay nada que se pueda hacer. El mundo es taaaan injusto.”
Una mejor pregunta

¿Qué me va a pasar? es una pregunta que está llena de miedo. Asume que no tenemos injerencia sobre lo qué va a pasar y que de alguna manera somos víctimas de lo que está ocurriendo. Niega la ley de causa-efecto y crea mucho temor.
¿Qué puedo hacer? es una mejor pregunta porque está llena de posibilidades. Nos pone en el centro de la acción y nos fuerza a buscar una solución.
La manera más simple de hacer que algo mejore

Las iniciativas nunca escasean en las organizaciones. Siempre hay un empuje para mejorar esto o aquello. En todo momento hay algo que alguien quiere que se haga de mejor manera.
Ponte en tu lugar

Una mejor pregunta es ¿Estoy en el lugar en el que yo debiera estar? Después de todo, si de algo tienes control es sobre dónde estás tú en tu vida. Esta sí es una pregunta constructiva y transformadora que vale la pena hacer una y otra vez.
Enseñar preguntando

Un verdadero maestro dejará a su alumno luchar con lo que no sabe. Lo verá con compasión y lo acompañará durante el proceso pero nunca le dará la respuesta pues sabe que dar la respuesta interrumpirá el proceso de aprendizaje.
Las preguntas que más ayudan a liderar

Sin duda alguna, la ruta más directa para desarrollar a alguien es el uso de preguntas efectivas. Pero no todas las preguntas son creadas igual. Usa las preguntas correctas y podrás multiplicar el efecto de tus esfuerzos como líder.
El arte de comprender

Comprender es preferir recibir una sorpresa que obtener una respuesta. Es hacer preguntas con una genuina curiosidad que busca encontrar lo que antes se desconocía. Es sentirse cómodo con la incertidumbre y aceptar las cosas como realmente son.
3 preguntas mágicas para mejorar cualquier situación

Aprende las 3 preguntas que te puedes hacer una y otra vez para ayudarte a resolver casi cualquier problema o situación difícil que afrontes.
¿Está muriendo la curiosidad de nuestros niños?

Cuando veo el mundo a mi alrededor y como están aprendiendo nuestros niños no puedo evitar preguntar, ¿está muriendo la curiosidad de nuestros niños?