Creer es lo primero

Todo lo que la humanidad ha construido nació en la mente de alguien antes de materializarse. Nada que el ser humano haya producido ha venido del éter. Todo empieza cuando alguien cree que algo es posible.

No importa si lo que creemos es que podemos cambiar nuestras vidas o inventar un carro eléctrico. No importa si creemos en que podemos vivir en un mundo sin violencia o si creemos que podemos colonizar Marte. Todo empieza con la creencia de que algo es posible.

Es esta capacidad de creer una de las mas potentes fuerzas que le dan forma al mundo en que vivimos. La capacidad de creer que las cosas pueden ser mejores ha sido la chispa que ha encendido el fuego en el corazón de los más grandes héroes de la historia. Al mismo tiempo, la capacidad que tienen las personas de creer que un ser humano puede ser Dios ha desatado las más grandes calamidades que ha tenido que vivir la humanidad.

Creer es lo primero. Creer es por donde todo empieza. Esos primeros pensamientos que nos convencen de que podemos cambiar el mundo que nos rodea son la gasolina del progreso y la innovación.

Ya que todos tenemos esta bella capacidad de poder creer en que las cosas pueden ser mejores, ¿Por qué limitarnos a creer en un mundo que sea tan solo un poco mejor? ¡Mejor dediquémonos a creer en algo que sea realmente mucho mejor!