Recientemente acaba de pasar el WWDC. Escribí sobre mis expectativas del evento y que podíamos esperar. Estuve equivocado respecto al lanzamiento del iPhone 6. Simplemente no hubo nuevo hardware.
Bueno, como todos los años, corrí a instalar el beta de las nuevas versiones de iOS y de OS X disponibles. Esto a pesar de la mala experiencia que claramente recuerdo haber tenido el año pasado al poner el beta en mi teléfono y computadora.
Les adelanto que este año el beta de iOS 8 está en una fase tan temprana que lo tuve que desinstalar pues mi iPhone prácticamente quedó inservible. Fue una experiencia muy mala. Ojo: no estoy culpando para nada a Apple. Ellos hacen muy claro que el software en este punto es beta y debe ser utilizado tan solo para realizar pruebas.
Y es aquí donde entra la magia de las presentaciones de Apple. El producto que están presentando no está completo. Está aún en desarrollo. Y sin embargo, durante las dos horas que duran sus keynotes todo sale maravilloso. Cautivan a la audiencia y a todos sus actuales y posibles nuevos clientes. Todos queremos tener lo que están presentando ya! Y todo esto logran montar sobre un producto no terminado.
Apple logra lanzar tremendas presentaciones gracias a que construyen justo lo que necesitan construir para dar una gran presentación. Luego venden miles por qué construyen lo que necesitan construir para ser líderes en su mercado.
Creo que hablo por alguien mas que mi cuando digo que la magia de Apple está en lograrme hipnotizar año tras año con un producto que aún no está nisiquiera terminado!
